“Ali Bomaye!”

Sus habilidades deportivas fue lo que lo hicieron famoso, pero la manera en la que defendió sus ideales, la forma en la que estuvo presente para su cultura, sus poemas y discursos, su visión y su postura crítica del mundo occidental fue lo que lo convirtieron en icono.

Campeón mundial a los 22 años. Campeón olímpico. 4 veces campeón mundial. Se pasó al Islam, se cambió su nombre y se negó a ir a la guerra de Vietnam aunque eso le costara 3 años por fuera del Boxeo y una millonaria multa. Todo por defender sus ideales.

Y como él dice: "Peleó contra caimanes y contra una ballena. Esposó a los truenos y puso a los rayos tras las rejas. Asesinó a una roca, lesionó una piedra, y hospitalizó un ladrillo. ¡Era tan malo que enfermó a la medicina! Tan rápido que, podía correr a través de un huracán y no mojarse. Apagar la luz del cuarto y estar acostado antes de que el cuarto estuviera oscuro. Podía ahogar un vaso de agua y matar un árbol caído..."